Que nadie busque sus propios intereses sino los del prójimo.
Por eso, tenemos que pensar en el bien de los demás, y no sólo en nosotros mismos.
Que nadie procure su propio interés, sino el de los demás.
Ninguno busque su propio bien, sino el del otro.
Ninguno busque su propio bien, sino el del otro.