Pero iré pronto a vosotros, si el Señor quiere, y llegaré a conocer, ya no las palabras de aquellos inflados, sino su poder.
Lo cierto es que, si Dios quiere, iré a visitarlos muy pronto, y ya veremos no sólo cómo hablan sino cuánto poder tienen esos presumidos.
Sin embargo, si Dios quiere, muy pronto iré a visitarlos, y entonces sabré si esos valentones, además de hablar, hacen lo que dicen.
Mas iré pronto donde vosotros, si es la voluntad del Señor; entonces conoceré no la palabrería de esos orgullosos, sino su poder,
Pero iré pronto a vosotros, si el Señor quiere, y conoceré, no las palabras, sino el poder de los que andan envanecidos.
Pero iré pronto a vosotros, si el Señor quisiere; y entenderé, no las palabras de los que andan envanecidos, sino el poder.