Por tanto, en caso de haber pleitos con respecto a las cosas de esta vida, a los que para la iglesia son de poca estima, ¿a éstos ponéis para juzgar?
Por tanto, si tienen pleitos sobre tales asuntos, ¿cómo es que nombran como jueces a los que no cuentan para nada ante la iglesia?*
¿Por qué tratan de resolver esos problemas con jueces que no pertenecen a la iglesia?
Y cuando tenéis pleitos de este género ¡tomáis como jueces a los que la Iglesia tiene en nada!
Si, pues, tenéis juicios sobre cosas de esta vida, ¿ponéis para juzgar a los que son de menor estima en la iglesia?
Por tanto, si tuviereis juicios de cosas de esta vida, poned para juzgar a los que son de menor estima en la iglesia.