Ustedes fueron comprados por un precio; no se vuelvan esclavos de nadie.
Cuando Dios nos hizo libres por medio de la muerte de Cristo, pagó un precio muy alto. Por eso, no debemos hacernos esclavos de nadie.
Por precio fuisteis comprados; no os hagáis esclavos de los hombres.
Por precio sois comprados; no os hagáis siervos de los hombres.