Así, por el conocimiento tuyo se perderá el débil, un hermano por quien Cristo murió.
Entonces ese hermano débil, por quien Cristo murió, se perderá a causa de tu conocimiento.
Si en vosotros hemos sembrado bienes espirituales, ¡qué mucho que recojamos de vosotros bienes materiales!
Y por el conocimiento tuyo, se perderá el hermano débil por quien Cristo murió.
Y por tu conocimiento se perderá el hermano débil por el cual Cristo murió.