Entonces el Señor le ordenó al ángel que envainara su espada.
Entonces Yahveh ordenó al ángel que volviera la espada a la vaina.
Entonces Jehová habló al ángel, y éste volvió su espada a la vaina.
Y Jehová habló al ángel, y éste volvió su espada a la vaina.