Echaron suertes para cada puerta, participando tanto el pequeño como el grande, según sus casas paternas.
El cuidado de cada puerta se asignó echando suertes entre las familias, sin hacer distinción entre menores y mayores.
Echaron suertes para cada puerta, sobre pequeños y grandes, con arreglo a sus casas paternas.
Echaron suertes, el pequeño con el grande, según sus casas paternas, para cada puerta.
Y echaron suertes, el pequeño con el grande, por las casas de sus padres, para cada puerta.