Todo aquel que odia a su hermano es homicida, y sabéis que ningún homicida tiene vida eterna permaneciendo en él.
Todo el que odia a su hermano es un asesino, y ustedes saben que en ningún asesino permanece la vida eterna.
Si ustedes se odian unos a otros, son asesinos, y ya saben que ningún asesino puede tener la vida eterna.
Todo el que aborrece a su hermano es un asesino; y sabéis que ningún asesino tiene vida eterna permanente en él.
Todo aquel que aborrece a su hermano es homicida; y sabéis que ningún homicida tiene vida eterna permanente en él.
Todo aquel que aborrece a su hermano, es homicida; y sabéis que ningún homicida tiene vida eterna permanente en sí.