Y el que guarda sus mandamientos permanece en Dios, y Dios en él. Y por esto sabemos que él permanece en nosotros: por el Espíritu que nos ha dado.
El que obedece sus mandamientos permanece en Dios, y Dios en él. ¿Cómo sabemos que él permanece en nosotros? Por el Espíritu que nos dio.
Si obedecemos a Dios, viviremos unidos a él, y él vivirá unido a nosotros. Esto lo sabemos por el Espíritu Santo que nos ha dado.
Quien guarda sus mandamientos permanece en Dios y Dios en él; en esto conocemos que permanece en nosotros: por el Espíritu que nos dio.
Y el que guarda sus mandamientos, permanece en Dios, y Dios en él. Y en esto sabemos que él permanece en nosotros, por el Espíritu que nos ha dado.
Y el que guarda sus mandamientos, permanece en él, y él en él. Y en esto sabemos que él permanece en nosotros, por el Espíritu que nos ha dado.