Entonces el ángel de Jehovah volvió por segunda vez, y le tocó diciendo: —Levántate, come, porque el camino es demasiado largo para ti.
El ángel del Señor regresó y, tocándolo, le dijo: 'Levántate y come, porque te espera un largo viaje.'
El ángel de Dios fue por segunda vez, tocó a Elías y le dijo: «Levántate y come, pues el viaje será largo y pesado».
Volvió segunda vez el ángel de Yahveh, le tocó y le dijo: «Levántate y come, porque el camino es demasiado largo para ti.»
Y volviendo el ángel de Jehová la segunda vez, lo tocó, diciendo: Levántate y come, porque largo camino te resta.
Y volviendo el ángel de Jehová la segunda vez, le tocó, diciendo: Levántate, come, porque largo camino te resta.