Luego la mujer vino a Saúl; y al verle tan aterrorizado, le dijo: —He aquí que tu sierva ha obedecido tu voz. He arriesgado mi vida y he escuchado las palabras que me has hablado.
Al verlo tan asustado, la mujer se le acercó y le dijo: Yo, su servidora, le hice caso a usted y, por obedecer sus órdenes, me jugué la *vida.
La mujer se acercó a Saúl y, al verlo tan espantado, le dijo: —Yo sólo hice lo que usted me pidió, pues estoy para servirle. Por obedecerlo, he arriesgado mi vida.
Acercóse la mujer donde Saúl, y viendo que estaba tan conturbado, le dijo: «Tu sierva ha escuchado tu voz y he puesto mi vida en peligro por obedecer las órdenes que me diste.
Entonces la mujer vino a Saúl, y viéndolo turbado en gran manera, le dijo: He aquí que tu sierva ha obedecido a tu voz, y he arriesgado mi vida, y he oído las palabras que tú me has dicho.
Entonces la mujer vino a Saúl, y viéndole en grande manera turbado, le dijo: He aquí que tu sierva ha obedecido a tu voz, y he puesto mi vida en mi mano, y he oído las palabras que tú me has dicho.