Los pecados de algunos hombres se hacen patentes antes de comparecer en juicio, pero a otros les alcanzan después.
Los pecados de algunos son evidentes aun antes de ser investigados, mientras que los pecados de otros se descubren después.
Algunas veces podemos darnos cuenta de que una persona está pecando, aun antes de que se le juzgue. Pero otras veces no nos damos cuenta hasta mucho después.
Los pecados de algunas personas son notorios aun antes de que sean investigados; en cambio los de otras, lo son solamente después.
Los pecados de algunos hombres se hacen patentes antes que ellos vengan a juicio, mas a otros se les descubren después.
Los pecados de algunos hombres se manifiestan antes que vengan ellos a juicio; mas a otros les vienen después.