Porque si el ministerio de condenación era con gloria, ¡cuánto más abunda en gloria el ministerio de justificación!
Si es glorioso el ministerio que trae condenación, ¡cuánto más glorioso será el ministerio que trae la justicia!
Efectivamente, si el ministerio de la condenación fue glorioso, con mucha más razón lo será el ministerio de la justicia.
Porque si el ministerio de condenación fue con gloria, mucho más abundará en gloria el ministerio de justificación.
Porque si el ministerio de condenación fue glorioso, mucho más abundará en gloria el ministerio de la justificación.