Entonces Jehovah preguntó: '¿Quién inducirá a Acab, rey de Israel, para que suba y caiga en Ramot de Galaad?' Y uno respondía de una manera, y otro respondía de otra manera.
Y el Señor dijo: ¿Quién seducirá a Acab, rey de Israel, para que ataque a Ramot de Galaad y vaya a morir allí? Uno sugería una cosa, y otro sugería otra.
Entonces Dios preguntó quién iría a convencer a Ahab de que atacara a Ramot de Galaad y fuera vencido ahí. Unos decían una cosa, mientras que otros decían otra.
Preguntó Yahveh: “¿Quién engañará a Ajab, rey de Israel, para que suba y caiga en Ramot de Galaad?” Y el uno decía una cosa y el otro otra.
Y Jehová preguntó: ¿Quién inducirá a Acab rey de Israel, para que suba y caiga en Ramot de Galaad? Y uno decía así, y otro decía de otra manera.
Y Jehová dijo: ¿Quién inducirá a Acab rey de Israel, para que suba y caiga en Ramot de Galaad? Y uno decía así, y otro decía de otra manera.