Entonces un hombre de Dios fue a él y dijo: —Oh rey, que no vaya contigo el ejército de Israel; porque Jehovah no está con Israel ni con ninguno de los hijos de Efraín.
Pero un hombre de Dios fue a verlo y le dijo: Su Majestad, no permita que el ejército de Israel vaya con usted, porque el Señor no está con esos efraimitas.
Pero vino donde él un hombre de Dios que le dijo: «Oh rey, que no salga contigo el ejército de Israel, porque Yahveh no está con Israel, ni con ninguno de los efraimitas.
Mas un varón de Dios vino a él, y le dijo: Rey, no vaya contigo el ejército de Israel; porque Jehová no está con Israel, ni con todos los hijos de Efraín.
Mas un varón de Dios vino a él, diciéndole: Rey, no vaya contigo el ejército de Israel; porque Jehová no es con Israel, ni con todos los hijos de Efraín.