También los hijos de Israel y de Judá que habitaban en las ciudades de Judá trajeron los diezmos de las vacas y de las ovejas, y los diezmos de las cosas consagradas a Jehovah su Dios, y lo acumularon en montones.
De igual manera, los habitantes de Israel y los que vivían en las ciudades de Judá entregaron el diezmo de bueyes y ovejas, y de todas aquellas cosas que eran consagradas al Señor su Dios, y todo lo colocaron en montones.
Era el mes de Siván, cuando la gente de Israel y de Judá empezó a llevar a Jerusalén la décima parte de sus reses, de sus ovejas y de lo que habían apartado para Dios. Después de cuatro meses dejaron de guardar y acomodar sus ofrendas.
Los hijos de Israel y de Judá que habitaban en las ciudades de Judá trajeron también el diezmo del ganado mayor y menor y el diezmo de las cosas sagradas consagradas a Yahveh, su Dios, y lo distribuyeron por montones.
También los hijos de Israel y de Judá, que habitaban en las ciudades de Judá, dieron del mismo modo los diezmos de las vacas y de las ovejas; y trajeron los diezmos de lo santificado, de las cosas que habían prometido a Jehová su Dios, y los depositaron en montones.
También los hijos de Israel y de Judá, que habitaban en las ciudades de Judá, dieron del mismo modo los diezmos de las vacas y de las ovejas: y trajeron los diezmos de lo santificado, de las cosas que habían prometido a Jehová su Dios, y los pusieron por montones.