Sin embargo, los sacerdotes de los lugares altos no subían al altar de Jehovah en Jerusalén; sólo comían panes sin levadura entre sus hermanos.
Aunque los sacerdotes que habían servido en los altares paganos no podían ministrar en el altar del Señor en Jerusalén, participaban de las comidas sagradas junto con los otros sacerdotes.[4]
Con todo, los sacerdotes de los altos no podían acercarse al altar de Yahveh en Jerusalén, aunque comían los panes ázimos en medio de sus hermanos.
Pero los sacerdotes de los lugares altos no subían al altar de Jehová en Jerusalén, sino que comían panes sin levadura entre sus hermanos.
Pero los sacerdotes de los lugares altos no subían al altar de Jehová en Jerusalem, sólo comían panes sin levadura entre sus hermanos.