Entonces Eliseo dijo: —Oíd la palabra de Jehovah: Así ha dicho Jehovah: 'Mañana a estas horas, en la puerta de Samaria, se venderá una medida de harina refinada por un siclo, y dos medidas de cebada por un siclo.'
Eliseo contestó: Oigan la palabra del Señor, que dice así: Mañana a estas horas, a la *entrada de Samaria, podrá comprarse una medida[1] de flor de harina con una sola moneda de plata,[2] y hasta una doble medida de cebada por el mismo precio.
Eliseo respondió: —Pon atención al mensaje de Dios: “Mañana a esta hora, a la entrada de la ciudad de Samaria, con una moneda de plata se podrán comprar tres kilos de harina o seis kilos de cebada”.
Dijo Eliseo: «Escucha la palabra de Yahveh: Así dice Yahveh: Mañana a esta hora estará la arroba de flor de harina a siclo, y las dos arrobas de cebada a siclo, en la puerta de Samaría.»
Dijo entonces Eliseo: Oíd palabra de Jehová: Así dijo Jehová: Mañana a estas horas valdrá el seah de flor de harina un siclo, y dos seahs de cebada un siclo, a la puerta de Samaria.
DIJO entonces Eliseo: Oíd palabra de Jehová: Así dice Jehová: Mañana a estas horas valdrá una medida de flor de harina un siclo, y dos medidas de cebada un siclo, a la puerta de Samaria.