En efecto, así ocurrió: el pueblo lo atropelló a la entrada de la ciudad, y allí murió.
Y así sucedió, porque la gente lo atropelló a la entrada de la ciudad y murió.
Y así sucedió. El pueblo lo pisoteó en la puerta y murió.
Y le sucedió así; porque el pueblo le atropelló a la entrada, y murió.
Y le sucedió así; porque el pueblo le atropelló a la entrada, y murió.