Ella respondió: —¡No! Porque este mal de echarme es mayor que el otro que me has hecho. Pero él no la quiso escuchar.
¡No me eches de aquí! replicó ella. Después de lo que has hecho conmigo, ¡echarme de aquí sería una maldad aun más terrible! Pero él no le hizo caso,
Ella le suplicaba: —¡No, hermano mío, no me despidas así! Si lo que has hecho ya es malo, echarme de aquí será peor. Pero Amnón no le hizo caso.
Ella le dijo: «No, hermano mío, por favor, porque si me echas, este segundo mal es peor que el que me hiciste primero.» Pero él no quiso escucharla.
Y ella le respondió: No hay razón; mayor mal es este de arrojarme, que el que me has hecho. Mas él no la quiso oír,
Y ella le respondió: No hay razón; mayor mal es este de echarme, que el que me has hecho. Mas él no la quiso oír.