Pero Itai respondió al rey diciendo: —¡Vive Jehovah y vive mi señor el rey, que sea para muerte o sea para vida, dondequiera esté mi señor el rey, allí estará también tu siervo!
Pero Itay le respondió al rey: ¡Tan cierto como que el Señor y Su Majestad viven, juro que, para vida o para muerte, iré adondequiera que usted vaya!
Pero Itai le contestó: —Juro por Dios y por la vida de Su Majestad, que a donde usted vaya iré yo. Aunque me cueste la vida, yo estoy al servicio de Su Majestad.
Ittay respondió al rey: «¡Por vida de Yahveh y por tu vida, rey mi señor, que donde el rey mi señor esté, para muerte o para vida, allí estará tu siervo!»
Y respondió Itai al rey, diciendo: Vive Dios, y vive mi señor el rey, que o para muerte o para vida, donde mi señor el rey estuviere, allí estará también tu siervo.
Y respondió Itai al rey, diciendo: Vive Dios, y vive mi señor el rey, que, o para muerte o para vida, donde mi señor el rey estuviere, allí estará también tu siervo.