El rey dijo a Sadoc: —Haz volver el arca de Dios a la ciudad; pues si hallo gracia ante los ojos de Jehovah, él me hará volver y me permitirá ver el arca y su morada.
Luego le dijo el rey al sacerdote Sadoc: Devuelve el arca de Dios a la ciudad. Si cuento con el favor del Señor, él hará que yo regrese y vuelva a ver el arca y el lugar donde él reside.
Dijo el rey a Sadoq: «Haz volver el arca de Dios a la ciudad. Si he hallado gracia a los ojos de Yahveh, me hará volver y me permitirá ver el arca y su morada.
Pero dijo el rey a Sadoc: Vuelve el arca de Dios a la ciudad. Si yo hallare gracia ante los ojos de Jehová, él hará que vuelva, y me dejará verla y a su tabernáculo.
Y el rey dijo a Sadoc: Vuelve el arca de Dios a la ciudad; que si yo hallare gracia en los ojos de Jehová, él me volverá, y me dejará verla y a su tabernáculo: