Tú, Señor, eres mi lámpara; tú, Señor, iluminas mis tinieblas.
Dios mío, tú alumbras mi vida; tú iluminas mi oscuridad. Con tu ayuda venceré al enemigo y podré conquistar sus ciudades. Tus enseñanzas son perfectas, tu palabra no tiene defectos. Tú proteges como un escudo a los que buscan refugio en ti.
Tú eres, Yahveh, mi lámpara, mi Dios que alumbra mis tinieblas.
Tú eres mi lámpara, oh Jehová; Mi Dios alumbrará mis tinieblas.
Porque tú eres mi lámpara, oh Jehová: Jehová da luz a mis tinieblas.