Tú me armaste de valor para el combate; bajo mi planta sometiste a los rebeldes.
Tú me llenaste de valor para entrar en combate; tú hiciste que los rebeldes cayeran derrotados a mis pies.
Para el combate de fuerza me ciñes, doblegas bajo mí a mis agresores,
Pues me ceñiste de fuerzas para la pelea; Has humillado a mis enemigos debajo de mí,
Me ceñiste de fortaleza para la batalla, Y postraste debajo de mí los que contra mí se levantaron.