El se postró y preguntó: —¿Quién es tu siervo, para que mires a un perro muerto como yo?
Mefiboset se inclinó y dijo: ¿Y quién es este siervo suyo, para que Su Majestad se fije en él? ¡Si no valgo más que un *perro muerto!
Mefi-bóset volvió a inclinarse delante de David, y dijo: —¿A qué se debe que Su Majestad me trate así? ¡Un perro muerto y yo somos la misma cosa!
El se postró y dijo: «¿Qué es tu siervo, para que te fijes en un perro muerto como yo?»
Y él inclinándose, dijo: ¿Quién es tu siervo, para que mires a un perro muerto como yo?
Y él inclinándose, dijo: ¿Quién es tu siervo, para que mires a un perro muerto como yo?