'El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. El que venza, jamás recibirá daño de la muerte segunda.
El que tenga oídos, que oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. El que salga vencedor no sufrirá daño alguno de la segunda muerte.
’Si alguien tiene oídos, que ponga atención a lo que el Espíritu de Dios les dice a las iglesias. ’Los que triunfen sobre las dificultades y sigan confiando en mí, jamás serán separados de Dios.’”
El que tenga oídos, oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias: el vencedor no sufrirá daño de la muerte segunda.
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. El que venciere, no sufrirá daño de la segunda muerte.
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. El que venciere no recibirá daño de la muerte segunda.