Con un dios extraño actuará contra las fortalezas más fuertes y hará crecer en gloria a los que lo reconozcan. Les dará dominio sobre muchos, y por precio repartirá la tierra.
Con la ayuda de un dios extraño atacará las fortalezas más poderosas, y rendirá grandes honores a aquellos que lo reconozcan, pues en recompensa los pondrá como gobernadores de grandes multitudes y les dará tierras.
Para defender las ciudades conquistadas, pedirá el apoyo de un ejército que adora a otros dioses. Y a todos los que le rindan honores, los recompensará con puestos muy importantes y con grandes territorios.
Pondrá como defensores de las fortalezas al pueblo de un dios extranjero; a los que le reconozcan, les colmará de honores dándoles dominio sobre muchos y repartiéndoles la tierra como recompensa.
Con un dios ajeno se hará de las fortalezas más inexpugnables, y colmará de honores a los que le reconozcan, y por precio repartirá la tierra.
Y con el dios ajeno que conocerá, hará crecer en gloria los baluartes de Mauzim; y los hará enseñorear sobre muchos, y por interés repartirá la tierra.