No desampararás al levita que habite en tus ciudades, porque él no tiene parte ni heredad contigo.
Pero toma en cuenta a los levitas que vivan en tus ciudades. Recuerda que, a diferencia de ti, ellos no tienen patrimonio alguno.
»No se olviden de compartir sus productos con los de la tribu de Leví que viven en su ciudad, pues a ellos no se les dieron tierras para cultivar y a ustedes sí. »Cada tres años apartarán la décima parte de todo lo que cosechen durante el año, y la guardarán en la ciudad. Así, los de la tribu de Leví tendrán el alimento que necesiten. No sólo ellos podrán tomar alimentos de allí, sino también los huérfanos, las viudas y los refugiados que vivan en la ciudad. Si obedecen estas instrucciones, Dios los bendecirá y todo les saldrá bien».
Y no abandonarás al levita que vive en tus ciudades, ya que él no tiene parte ni heredad contigo.
Y no desampararás al levita que habitare en tus poblaciones; porque no tiene parte ni heredad contigo.
Y no desampararás al levita que habitare en tus poblaciones; porque no tiene parte ni heredad contigo.