‘Déjame pasar por tu tierra. Iré sólo por el camino. No me apartaré ni a la derecha ni a la izquierda.
Déjanos pasar por tu país; nos mantendremos en el camino principal, sin desviarnos ni a la derecha ni a la izquierda.
que nos dejara pasar por su territorio. Pasaríamos solamente por el camino principal y cruzaríamos el río Jordán, hasta llegar al territorio que nuestro Dios nos iba a dar. Le ofrecí pagarle por los alimentos y el agua que tomáramos, y le hice saber que los descendientes de Esaú y los moabitas nos habían permitido pasar por Ar y Seír.
«Voy a pasar por tu país; seguiré el camino sin desviarme a derecha ni a izquierda.
Pasaré por tu tierra por el camino; por el camino iré, sin apartarme ni a diestra ni a siniestra.
Pasaré por tu tierra por el camino: por el camino iré, sin apartarme a izquierda ni a derecha.