'Los levitas tomarán la palabra, y en voz alta le dirán a todo el pueblo de Israel:
»Estas son las maldiciones que leerán los sacerdotes ante todo el pueblo. Una vez leída cada maldición, y para declarar que está de acuerdo, todo el pueblo deberá gritar con fuerza: “¡Amén!” »Maldito sea el que haga un ídolo, y luego lo esconda. Dios odia esas cosas. »Maldito sea el que desprecie a su padre o a su madre. »Maldito sea el que no respete los límites de una propiedad y le robe terreno a su dueño. »Maldito sea el que engañe a un ciego y lo desvíe de su camino. »Maldito sea el que trate mal a los refugiados, a las viudas y a los huérfanos. »Maldito sea el hijo que tenga relaciones sexuales con la mujer de su padre. Esa es una gran falta de respeto. »Maldito sea el que tenga relaciones sexuales con un animal. »Maldito sea el que tenga relaciones sexuales con su hermana, aunque sólo sea hija de su padre o de su madre. »Maldito sea el que tenga relaciones sexuales con su suegra. »Maldito sea el que traicione a su amigo y lo mate. »Maldito sea el que cobre dinero por matar a un inocente. »Maldito sea el que no obedezca estas instrucciones».
Los levitas tomarán la palabra y dirán en voz alta a todos los israelitas:
Y hablarán los levitas, y dirán a todo varón de Israel en alta voz:
Y hablarán los levitas, y dirán a todo varón de Israel en alta voz: