El duro trabajo fatiga al necio, de manera que él ni siquiera sabe cómo ir a la ciudad.
El trabajo del necio tanto lo fatiga que ni el camino a la ciudad conoce.
No tiene ningún sentido que tanto trabaje el tonto, si no sabe ni en dónde está.
Lo que más molesta al necio es que no sabe ir a la ciudad.
El trabajo de los necios los fatiga; porque no saben por dónde ir a la ciudad.
El trabajo de los necios los fatiga; porque no saben por dónde ir a la ciudad.