Lo que ahora existe, ya existía; y lo que ha de existir, existe ya. Dios hace que la historia se repita.
Todo lo que ahora existe, ya existía mucho antes; y todo lo que habrá de existir, existe ya. Dios hace que todo vuelva a repetirse.
Lo que es, ya antes fue; lo que será, ya es. Y Dios restaura lo pasado.
Aquello que fue, ya es; y lo que ha de ser, fue ya; y Dios restaura lo que pasó.
Aquello que fue, ya es: y lo que ha de ser, fue ya; y Dios demanda lo que pasó.