Eclesiastés 4:8

Se da el caso de un hombre solo y sin sucesor, que no tiene ni hijo ni hermano; pero no cesa de todo su duro trabajo, ni sus ojos se sacian de riquezas, ni se pregunta: '¿Para quién me afano yo, privando a mi alma del bienestar?' También esto es vanidad y penosa tarea.

Otras versiones de la Biblia

vi a un hombre solitario, sin hijos ni hermanos, y que nunca dejaba de afanarse; ¡jamás le parecían demasiadas sus riquezas! «¿Para quién trabajo tanto, y me abstengo de las cosas buenas?», se preguntó. ¡También esto es absurdo, y una penosa tarea!

- Versão NVI-ES (Nueva Version Internacional)

Me refiero al hombre solitario, que no tiene hijos ni hermanos: todo el tiempo se lo pasa trabajando, y nunca está satisfecho; siempre quiere tener más. Ese hombre jamás se pone a pensar si vale la pena tanto trabajar y nunca gozar de la vida. ¡No tiene sentido esforzarse tanto!

- Versão TLA (Traducción en Lenguaje Actual)

a saber, un hombre solo, sin sucesor, sin hijos ni hermano; sin límite a su fatiga, sin que sus ojos se harten de riqueza. «Mas ¿para quién me fatigo y privo a mi vida de felicidad?» También esto es vanidad y mal negocio.

- Versão BJ-ES (Biblia de Jerusalen)

Está un hombre solo y sin sucesor, que no tiene hijo ni hermano; pero nunca cesa de trabajar, ni sus ojos se sacian de sus riquezas, ni se pregunta: ¿Para quién trabajo yo, y defraudo mi alma del bien? También esto es vanidad, y duro trabajo.

- Versão RVR60 (Reina Valera 1960)

Está un hombre solo y sin sucesor; que ni tiene hijo ni hermano; mas nunca cesa de trabajar, ni sus ojos se sacian de sus riquezas, ni se pregunta: ¿Para quién trabajo yo, y privo mi alma del bien? También esto es vanidad, y duro trabajo.

- Versão RVR04 (Reina Valera 2004)

Contexto del verso

  • 7
    Otra vez me volví y vi esta vanidad debajo del sol:
  • 8
    Se da el caso de un hombre solo y sin sucesor, que no tiene ni hijo ni hermano; pero no cesa de todo su duro trabajo, ni sus ojos se sacian de riquezas, ni se pregunta: '¿Para quién me afano yo, privando a mi alma del bienestar?' También esto es vanidad y penosa tarea.
  • 9
    Mejor dos que uno solo, pues tienen mejor recompensa por su trabajo.

Imagen del verso

Se da el caso de un hombre solo y sin sucesor, que no tiene ni hijo ni hermano; pero no cesa de todo su duro trabajo, ni sus ojos se sacian de riquezas, ni se pregunta: '¿Para quién me afano yo, privando a mi alma del bienestar?' También esto es vanidad y penosa tarea. - Eclesiastés 4:8