Todo el duro trabajo del hombre es para su boca; y con todo eso, su alma no se sacia.
Mucho trabaja el hombre para comer, pero nunca se sacia.
Todo el tiempo trabajamos para calmar el hambre, pero nuestro estómago nunca queda satisfecho.
Todo el mundo se fatiga para comer, y a pesar de todo nunca se harta.
Todo el trabajo del hombre es para su boca, y con todo eso su deseo no se sacia.
Todo el trabajo del hombre es para su boca, y con todo eso su alma no se sacia.