Esposas, sométanse a sus propios esposos como al Señor.
Las esposas deben sujetarse a sus esposos, así como lo hacen con Cristo.
Las mujeres a sus maridos, como al Señor,
Las casadas estén sujetas a sus propios maridos, como al Señor;
Las casadas estén sujetas a sus propios maridos, como al Señor.