Ahora pues, dad órdenes para que cesen esos hombres y que no sea reedificada esa ciudad, hasta que yo lo ordene.
Por eso, ordénenles a esos hombres que cesen sus labores, que suspendan la reconstrucción de la ciudad, hasta que yo promulgue un nuevo edicto.
Por lo tanto, ordeno detener la reconstrucción de la ciudad hasta que reciban órdenes mías.
Ordenad, pues, que se interrumpa la empresa de esos hombres: esa ciudad no debe ser reconstruida hasta nueva orden.
Ahora, pues, dad orden que cesen aquellos hombres, y no sea esa ciudad reedificada hasta que por mí sea dada nueva orden.
Ahora, pues, dad orden que cesen aquellos hombres, y no sea esa ciudad edificada, hasta que por mí sea dado mandamiento.