Con el resto de la plata y del oro, haced lo que tú y tus hermanos creáis conveniente hacer, conforme a la voluntad de vuestro Dios.
Con el resto de la plata y del oro tú y tus compañeros podrán hacer lo que les parezca mejor, de acuerdo con la voluntad del Dios de ustedes.
Decidan ustedes lo que se deba hacer con el dinero que sobre, de acuerdo con lo que Dios les indique.
y la plata y el oro que sobre, lo emplearéis como mejor os parezca a ti y a tus hermanos, conforme a la voluntad de vuestro Dios.
Y lo que a ti y a tus hermanos os parezca hacer de la otra plata y oro, hacedlo conforme a la voluntad de vuestro Dios.
Y lo que a ti y a tus hermanos os parezca hacer con el resto de la plata y oro, hacedlo conforme a la voluntad de vuestro Dios.