Y lo demás que se requiera para la casa de tu Dios, y que te corresponda dar, dalo de la casa de los tesoros del rey.
Cualquier otro gasto que sea necesario para el templo de tu Dios, se cubrirá del tesoro real.
Todo lo que necesites, lo pagará el tesoro del reino.
Lo que aún se necesite para la Casa de tu Dios y que tú tengas que procurarte, se te dará de los tesoros reales.
Y todo lo que se requiere para la casa de tu Dios, que te sea necesario dar, lo darás de la casa de los tesoros del rey.
Y lo demás que se requiera para la casa de tu Dios que te sea necesario dar, lo darás de la casa de los tesoros del rey.