Después de estas cosas, y una vez apaciguada la ira del rey Asuero, él se acordó de Vasti, de lo que ella había hecho y de lo que se había decidido con respecto a ella.
Algún tiempo después, ya aplacada su furia, el rey Asuero se acordó de Vasti y de lo que había hecho, y de lo que se había decretado contra ella.
Más tarde, cuando al rey Asuero se le pasó el enojo, se acordó de Vasti y de lo que ella había hecho, y de lo que se había ordenado contra ella.
Después de estos sucesos se aplacó la cólera del rey Asuero y se acordó de Vastí, de cuanto había hecho, y de lo que acerca de ella se había decidido.
Pasadas estas cosas, sosegada ya la ira del rey Asuero, se acordó de Vasti y de lo que ella había hecho, y de la sentencia contra ella.
PASADAS estas cosas, sosegada ya la ira del rey Asuero, se acordó de Vasti, y de lo que hizo, y de lo que fue sentenciado contra ella.