Luego pon la olla vacía sobre las brasas, para que se caliente y arda su bronce, con el fin de que en ella sea fundida su inmundicia y desaparezca su herrumbre.’
¡Pongan la olla vacía sobre las brasas, hasta que el bronce esté al rojo vivo! ¡Que se fundan en ella sus *impurezas, y se consuma su herrumbre!
Pon sobre el fuego la olla vacía, para que el cobre se caliente. Así se pondrá al rojo vivo, y el óxido se le quitará.
Y mantén la olla vacía sobre las brasas, para que se caliente, se ponga al rojo el bronce, se funda dentro de ella su suciedad, y su herrumbre se consuma.
Asentando después la olla vacía sobre sus brasas, para que se caldee, y se queme su fondo, y se funda en ella su suciedad, y se consuma su herrumbre.
Asentando después la olla vacía sobre sus brasas, para que se caldee, y se queme su fondo, y se funda en ella su suciedad, y se consuma su moho.