Tanto el templo como el Lugar Santísimo tenían puertas dobles.
Tanto la entrada al Lugar Santo como la entrada al Lugar Santísimo tenían puertas dobles, y cada puerta se abría hacia la pared.
El Santo tenía una puerta doble, y el Santuario una puerta doble.
El templo y el santuario tenían dos puertas.
Y el templo y el santuario tenían dos portadas.