Y tú, oh hijo de hombre, toma una cuchilla afilada, una navaja de barbero. Tómala y hazla pasar sobre tu cabeza y sobre tu barba. Luego toma una balanza para pesar y reparte los pelos.
'Hijo de hombre, toma ahora una espada afilada, y úsala como navaja de afeitar para raparte la cabeza y afeitarte la barba. Toma luego una balanza y divide tu cabello cortado.
Luego Dios me dijo: «Ezequiel, hombre mortal, toma una navaja afilada y córtate el pelo de la cabeza y de la barba. Toma luego una balanza y pesa el pelo en tres partes iguales.
Tú, hijo de hombre, toma una espada afilada, tómala como navaja de barbero, y pásatela por tu cabeza y tu barba. Luego tomarás una balanza y dividirás en partes lo que hayas cortado.
Y tú, hijo de hombre, tómate un cuchillo agudo, toma una navaja de barbero, y hazla pasar sobre tu cabeza y tu barba; toma después una balanza de pesar y divide los cabellos.
Y TÚ, hijo de hombre, tómate una espada aguda, una navaja de barbero toma, y hazla pasar sobre tu cabeza y tu barba; tómate después un peso de balanza, y divide los cabellos.