Sí, hermano, yo quisiera tener este beneficio de ti en el Señor: ¡Conforta mi corazón en el Señor!
Sí, hermano, ¡que reciba yo de ti algún beneficio en el Señor! Reconforta mi corazón en Cristo.
Hermano Filemón, hazme este favor, pero no lo hagas por mí, sino por tu amor al Señor. Tú y yo somos hermanos: ¡dame esa tranquilidad!
Sí, hermano, hazme este favor en el Señor. ¡Alivia mi corazón en Cristo!
Sí, hermano, tenga yo algún provecho de ti en el Señor; conforta mi corazón en el Señor.
Si, hermano, góceme yo de ti en el Señor; recrea mis entrañas en el Señor.