conforme a mi anhelo y esperanza: que en nada seré avergonzado; sino que con toda confianza, tanto ahora como siempre, Cristo será exaltado en mi cuerpo, sea por la vida o por la muerte.
Mi ardiente anhelo y esperanza es que en nada seré avergonzado, sino que con toda libertad, ya sea que yo viva o muera, ahora como siempre, Cristo será exaltado en mi cuerpo.
Espero firmemente no hacer nada que pueda avergonzarme. Al contrario, sea que yo viva o muera, quiero portarme siempre con valor para que, por medio de mí, la gente hable de lo maravilloso que es Cristo.
conforme a lo que aguardo y espero, que en modo alguno seré confundido; antes bien, que con plena seguridad, ahora como siempre, Cristo será glorificado en mi cuerpo, por mi vida o por mi muerte,
conforme a mi anhelo y esperanza de que en nada seré avergonzado; antes bien con toda confianza, como siempre, ahora también será magnificado Cristo en mi cuerpo, o por vida o por muerte.
conforme a mi expectación y esperanza, que en nada seré avergonzado; antes con toda confianza, como siempre, así también ahora, Cristo será magnificado en mi cuerpo, o por vida, o por muerte.