No obstante, la Escritura lo encerró todo bajo pecado, para que la promesa fuese dada por la fe en Jesucristo a los que creen.
Pero la Escritura declara que todo el mundo es prisionero del pecado,* para que mediante la fe en Jesucristo lo prometido se conceda a los que creen.
La Biblia dice que el pecado nos domina a todos, de modo que el regalo que Dios prometió es para los que confían en Jesucristo.
Pero, de hecho, la Escritura encerró todo bajo el pecado, a fin de que la Promesa fuera otorgada a los creyentes mediante la fe en Jesucristo.
Mas la Escritura lo encerró todo bajo pecado, para que la promesa que es por la fe en Jesucristo fuese dada a los creyentes.
Mas la escritura encerró todo bajo pecado, para que la promesa por la fe de Jesucristo, fuese dada a los que creen.