Ustedes, hermanos, al igual que Isaac, son hijos por la promesa.
Hermanos míos, ustedes son como Isaac, el hijo que Dios le prometió a Abraham. Y digo que son como él, porque son los hijos que Dios le había prometido.
Y vosotros, hermanos, a la manera de Isaac, sois hijos de la Promesa.
Así que, hermanos, nosotros, como Isaac, somos hijos de la promesa.
Así que, hermanos, nosotros, como Isaac, somos hijos de la promesa.