Pero si os mordéis y os coméis los unos a los otros, mirad que no seáis consumidos los unos por los otros.
Pero si siguen mordiéndose y devorándose, tengan cuidado, no sea que acaben por destruirse unos a otros.
Les advierto que, si se pelean y se hacen daño, terminarán por destruirse unos a otros.
Pero si os mordéis y os devoráis mutuamente, ¡mirad no vayáis mutuamente a destruiros!
Pero si os mordéis y os coméis unos a otros, mirad que también no os consumáis unos a otros.
Mas si os mordéis y devoráis los unos a los otros, mirad que no os consumáis los unos a los otros.