Luego regresaron, llegaron a En-mispat, que es Cades, y devastaron todo el campo de los amalequitas y de los amorreos que habitaban en Hazezón-tamar.
Al volver, llegaron hasta Enmispat, es decir, Cades, y conquistaron todo el territorio de los amalecitas, y también el de los amorreos que vivían en la región de Jazezón Tamar.
Después de eso regresaron a Cadés y conquistaron todo el territorio de los amalecitas. En Hasesón-tamar vencieron a los amorreos que vivían allí.
De vuelta, llegaron a En Mispat (o sea, Cadés), y batieron todo el territorio de los amalecitas, y también a los amorreos que habitaban en Jasesón Tamar.
Y volvieron y vinieron a En-mispat, que es Cades, y devastaron todo el país de los amalecitas, y también al amorreo que habitaba en Hazezontamar.
Y volvieron y vinieron a Emispat, que es Cades, y devastaron todas las haciendas de los amalacitas, y también al amorreo, que habitaba en Hazezón-tamar.