El también hizo un potaje, lo llevó a su padre y le dijo: —Levántate, padre mío, y come de la caza de tu hijo, para que tú me bendigas.
También él preparó un guiso, se lo llevó a su padre y le dijo: Levántate, padre mío, y come de lo que ha cazado tu hijo. Luego podrás darme tu bendición.
También él preparó un plato de comida muy sabroso, se lo llevó a su padre, y le dijo: —Levántate, padre mío, y ven a comer de lo que maté, para que me des tu bendición.
Hizo también él un guiso suculento y llevándoselo a su padre le dijo: «Levántese mi padre y coma de la caza de su hijo, para que me bendiga tu alma.»
E hizo él también guisados, y trajo a su padre, y le dijo: Levántese mi padre, y coma de la caza de su hijo, para que me bendiga.
Y él también hizo un guisado, y lo trajo a su padre, y le dijo: Levántese mi padre, y coma de la caza de su hijo, para que me bendiga su alma.