Pero sucedió que al dar el último suspiro (porque murió), llamó el nombre de su hijo Benoní. Pero su padre lo llamó Benjamín.
No obstante, ella se estaba muriendo, y en sus últimos suspiros alcanzó a llamar a su hijo Benoní,[7] pero Jacob, su padre, le puso por *nombre Benjamín.[8]
El niño nació bien, pero Raquel estaba a punto de morirse. En sus últimos momentos de vida le puso a su hijo el nombre de Ben-oní, que significa «hijo de mi dolor». Sin embargo, Jacob le cambió el nombre y le puso Benjamín, que significa «hijo favorito».
Entonces ella, al exhalar el alma, cuando moría, le llamó Ben Oní; pero su padre le llamó Benjamín.
Y aconteció que al salírsele el alma (pues murió), llamó su nombre Benoni; mas su padre lo llamó Benjamín.
Y aconteció que al salírsele el alma, (pues murió) llamó su nombre Benoni; mas su padre lo llamó Benjamín.